La verdad es que no paran las marcas de hacer prototipos y previsiones de cómo será el futuro. La época de cambio que vive la industria de la automoción es tan importante que las hipótesis en forma de modelos conceptuales no paran de irrumpir. No obstante, resulta curioso que muchos fabricantes parecen haberse puesto de acuerdo en algunos rasgos: mucha tecnología, habitáculos más sobrios o espaciosos, autonomía en la conducción…
Como en TopDriverz también nos gusta anticiparnos al futuro (en la medida que podemos), en las próximas líneas vamos a dedicarnos a hablar del coche conceptual Audi Urbansphere, que fue presentado en 2022 por la casa de los cuatro aros durante el Salón de Shanghái (aunque de manera digital). No saldrá al mercado como unidad de producción, sino que en principio servirá de referencia para un nuevo coche que saldrá en 2025 combinando rasgos de los otros concepts Skysphere y Grandsphere.
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Análisis del Audi Urbansphere
Una vez que hemos puesto todo en contexto a través de la introducción de rigor, es el momento de ir al grano como es debido y hablar con los máximos detalles posibles sobre el Audi Urbansphere. Decimos los máximos detalles porque es un modelo conceptual y, quizá, haya detalles que no podamos contaros. Eso sí, abordaremos los puntos que solemos destacar en las reseñas si los de Ingolstadt nos lo han desvelado.
1. Diseño exterior
Es preciso decir antes de nada que el Audi Urbansphere es fruto de los estudios que la compañía tiene en Pekín y la sede central ubicada en Alemania. Además, se ha nutrido de las ideas aportadas por clientes potenciales de China, quienes les han dejado experiencias vividas y lo que desean tener a su alcance cuando se ponen al volante de un coche.
Por ello, se puede decir que su confección está pensada para el conductor que se ha de mover por las megaurbes del gigante asiático y lidiar con el incesante tráfico que las caracteriza. La idea sobre la que se cimenta es la de ofrecer el máximo espacio interior posible en su habitáculo, haciendo que la estancia sea cómoda a más no poder para el pasajero sobre todo. Un coche, en definitiva, hecho desde dentro hacia afuera.
Dicho todo esto, presenta unas dimensiones de 5.51 metros de largo, 2.01 metros de ancho y 1.78 metros de alto. A ello hay que añadir una distancia de ejes cifrada en 3.40 metros, más propia de un furgón que de un vehículo medio que se puede ver por la calle o en la carretera. También es notablemente más extenso que el sedán de lujo de la marca, el A8, y sus 5.19 metros.
Su diseño se caracteriza por presentar unas formas inéditas en un coche y sobre todo en la marca de Ingolstadt, lo que desde Audi aseguran que responde a la intención de maximizar el espacio interior. Lo que sí es más reconocible es su parrilla singleframe que se ve en el frontal, ya que la llevan otros vehículos eléctricos de su oferta, aunque en este caso convive con unas luces LED matriciales que le dan gran expresividad.
Esas luces también se encuentran en la zaga, y tienen el rol de construir un vínculo entre el interior y el exterior. De esta forma, cuando el coche está circulando en modo autónomo, se iluminan de un modo determinado con la intención de que el resto que lo ve sea consciente. Los pasos de rueda son prominentes, con llantas de aleación de 24 pulgadas.
2. Estructura mecánica
Como no podía ser de otra forma en un Concept, el Audi Urbansphere presenta una propuesta mecánica totalmente eléctrica. A esta idea le da forma gracias a una batería de 120 kWh de capacidad situada en medio de ambos ejes, en los que se localizan sus dos motores En conjunto, estos propulsores le aportan 401 CV de potencia (295 kW) y un par motor máximo de 690 Nm. Goza de una autonomía astronómica que va hasta los 750 kilómetros tras una carga completa.
A ello hay que añadirle un sistema eléctrico de 800 voltios, que puede alimentarse a través de cargas ultrarrápidas de 270 kW, lo que le permite pasar del 5 al 80 por ciento en un periodo de tiempo inferior a 25 minutos. Para hacerse una idea, basta decir que en 10 minutos se pueden recuperar más de 300 kilómetros. Esos propulsores se coordinan electrónicamente e implementan la tracción total en base a las necesidades de la conducción, la eficiencia y la autonomía. De esta forma, el motor delantero se puede desactivar para reducir la fricción, lo que se traduce en un menor consumo de energía cuando avanza por inercia.
La suspensión neumática adaptativa que disfruta permite un control de la amortiguación que se traduce en una conducción muy agradable en autopista, asfalto irregular y el parcheado característico de las calles céntricas de las ciudades. Más aún teniendo en cuenta que ofrecerá al usuario un nivel 4 de conducción autónoma. Todo ello está cimentado sobre la Plataforma Eléctrica Premium (PPE), concebida única y exclusivamente para acoger estructuras de este tipo y sacarle el máximo partido a las baterías y a esta propulsión.
3. Equipamiento interno
Si hay algo que no falta en el Audi Urbansphere es tecnología y confort, dos elementos que conviven en el interior de su habitáculo. Este consta de cuatro asientos individuales que, a su vez, gozan de diversos ajustes para poder viajar a las mil maravillas, incluso mejor que en primera clase. El suelo sobre el que se sitúan es totalmente plano
Entre estos se encuentran un modo Relax y Entertain, que da la posibilidad de inclinar el respaldo hasta 60 grados mientras que, a su vez, se extienden unos reposapiernas. Más comodidad hay aún si cabe con los reposabrazos que portan los asientos. En la consola central, la cual se puede levantar, hay vasos y un dispensador de agua para servir bebida.
Se nota que el público objetivo es muy exclusivo, y es que a bordo ofrece una gran pantalla OLED que se coloca justo delante de los dos pasajeros de la fila trasera. Este imponente monitor puede emplearse perfectamente para asistir a una vídeo reunión de trabajo, como también para ver una película o un capítulo de una serie. Además, cuando no se está usando, se pliega en el techo. Los asientos delanteros se pueden girar para esas reuniones también.
Al fin y al cabo, su distancia de ejes de 3.40 metros le convierte en una especie de suite flotante que permite la productividad y el refugio para quienes entran en él. En su salpicadero de madera y en su panel de cristal, que constituye el ancho del total, se proyecta la información de manera digital, lo que Audi califica como filosofía de “desintoxicación digital” dado que considera que la tecnología, en este caso, no es intrusiva.
Como curiosidad, su volante y pedales pueden ser retraídos cuando el vehículo está circulando en modo autónomo, lo que amplía el espacio y la comodidad de los cuatro ocupantes que pueden viajar en él. Para acabar con este punto, las puertas traseras se abren en sentido inverso dado que este coche prescinde del pilar B.
4. ¿Qué coche podría beber del Audi Urbansphere?
Hay quien dice que el Audi Urbansphere podría servir de referencia para confeccionar el Audi Landjet, que será el primer vehículo del grupo Volkswagen en usar su nueva batería, la cual girará en torno al concepto de celda de batería unificada, que promete reducir a la mitad los costes de producción en el segmento de acceso en comparación con los que asume en la actualidad el conglomerado alemán.
Esto es posible gracias a que el 80 por ciento de sus vehículos eléctricos van a contar con un mismo núcleo, una meta que esperan conseguir en el año 2030. De esta forma, las celdas de las baterías se podrán integrar directamente en la estructura del coche, aunque hay que apuntar que el interior de las celdas podrá variar en base al tipo de vehículo al que nutran. En cualquier caso, esta tecnología se empezará a desarrollar en 2023 y saldrá al mercado en 2024.
El Audi Landjet será un SUV lujoso perteneciente al segmento D que, en principio, contará con siete plazas en su interior y un tamaño superior al Q8, lo que se traduce en más de cinco metros de longitud. El auto gozará previsiblemente de unos 650 kilómetros de autonomía homologados en ciclo WLTP, además de una elevada automatización.
El Landjet verá la luz en medio del Proyecto Ártemis, una iniciativa de la marca de los cuatro aros para darle un acelerón a la producción de modelos eléctricos y autónomos dentro del grupo Volkswagen. El propósito no es otro que agilizar la siempre tediosa burocracia y ganar competitividad en el campo de la movilidad y la sostenibilidad, lo cual va a marcar indudablemente los próximos años en la industria. Mientras que llegue ese momento, habrá que esperar a más novedades facilitadas por los alemanes, pero todo hace indicar que los modelos que incorporen esa nueva tecnología eléctrica no van a decepcionar.
