La fiebre de los SUV se extiende más allá del contexto de sostenibilidad en el que se encuentra inmersa la industria de la automoción. Como no podía ser de otra forma, estos se están adaptando a la compañía de baterías eléctricas y de tecnologías híbridas para seguir dando lo mejor de sí a los conductores de todo el mundo.
Un ejemplo claro de ello es el Volvo C40 Recharge, que ya apareció brevemente por aquí en una ocasión y que esta vez va a copar el principal protagonismo en la nueva entrada de TopDriverz. Mucho promete este coche que, a su vez, es el segundo 100 % eléctrico de la marca sueca. Veremos si puede cumplir con las expectativas.
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Análisis del Volvo C40 Recharge
Tras esta breve introducción de rigor ya finiquitada, es el momento de ir al turrón y hablar detenidamente de todo lo que ofrece este modelo. Para ello, pondremos el foco en su diseño exterior, en la estructura mecánica que ofrece, en el equipamiento interno que aguarda en el habitáculo, el precio a cambio del cual se puede conseguir y una breve comparación con otro vehículo para ampliar miradas.
1. Diseño exterior
El Volvo C40 Recharge es un SUV que apuesta por un enfoque coupé englobado en el segmento C y que, a su vez, se encuentra inmerso en su primera generación, la cual vio la luz en el año 2021. Su estructura modular compacta está integrada sobre la plataforma CMA que Volvo ideó en su día, de ahí que comparta algunos rasgos con el primer eléctrico que sacaron, el XC40 Recharge. De hecho, por sus similitudes hay quien se refiere a él como la versión coupé de este.
En el frontal presenta una parrilla totalmente hermética, que a su vez está flanqueada en los lados por ópticas afiladas. En la zona trasera se muestra más dinámico, y eso lo hace posible a la marcada caída del techo que desemboca en el portón del maletero muy inclinado. En la parte más posterior del techo contiene un alerón y, ya más por detrás, presenta una banda luminosa que le da cierta modernidad.
En lo que a dimensiones se refiere, cuenta con 4.43 metros de largo, 1.58 metros de alto y 1.85 metros de ancho. A ello hay que añadir una distancia de ejes cifrada en 2.70 metros, lo que se traduce en un espacio interior suficiente para que viajen cinco pasajeros.
Precisamente, una de las diferencias que le separan con su “hermano” es una menor altura con respecto al suelo, concretamente de siete centímetros, lo que implica que hay menos espacio para las cabezas en los asientos de detrás y que afecta a la habitabilidad. Su maletero parte de 443 litros de capacidad, ampliables a 31 más con su baúl delantero.
2. Estructura mecánica
Como ya es costumbre en algunos vehículos recientes, el Volvo C40 Recharge rehúye de las motorizaciones de combustión para enfocarse totalmente en las eléctricas. No en vano, hay una normativa europea que a medio plazo hay que cumplir y esto es una buena manera de anticiparse. Dicho esto, en total ofrece tres versiones distintas que, a su vez, se pueden diferenciar en dos niveles de rendimiento.
La versión de acceso está encarnada por una unidad que lleva consigo un motor de 231 CV de potencia y que, al mismo tiempo, está acompañado por una batería de 70 kWh de capacidad bruta. En el siguiente escalón se ubica otro C40 Recharge con doble motor y baterías de iones de litio, que en su caso gozan de una capacidad de 75 kWh y que pueden ser recargados en corriente continua a razón de hasta 150 kW.
El tope de gama y, por tanto, la versión más prestacional, es la que goza de una potencia de 408 CV aportada por dos motores que ofrecen tracción integral y un extraordinario par motor máximo de 660 Nm. En palabras de la compañía sueca, homologa una autonomía en ciclo WLTP de 420 kilómetros, gracias a una batería de 78 kWh brutos (75 útiles) ubicada en su zona central. Esa batería le permite cargar un 80 % de su capacidad en unos 40 minutos aproximadamente con corriente continua de hasta 150 kW.
Su velocidad punta es de 180 kilómetros por hora, que se ve limitada electrónicamente, y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en cuestión de 4.9 segundos. Ni que decir tiene que puede presumir de contar con la etiqueta CERO de la Dirección General de Tráfico (DGT) en España. Su consumo, de media, se sitúa por debajo de los 18 kWh por cada centenar de kilómetros recorridos.
3. Equipamiento interno
En el interior de su habitáculo predomina la calidad de los materiales y de los acabados, lo que aporta a los pasajeros un extra en cuanto a comodidad. Los ajustes también disfrutan de esmero y mucho cuidado. Lo que sí tiene y que es común en muchos otros modelos de coche es la diferenciación de varios niveles de equipamiento, concretamente tres: Core, Plus y Ultimate.
Lo que separa uno de otro es la tecnología que incorporan y los extras en concepto de equipamiento, porque el aspecto que lucen es prácticamente idéntico. En el sistema de infoentretenimiento ofrece una pantalla táctil de nueve pulgadas dispuesta en vertical que puede convivir tanto con Android Auto como con Apple CarPlay. No falta un cuadro de instrumentos digital, conectividad para dispositivos móviles, asientos eléctricos calefactables por delante, Google Assistant, navegador y faros LED, entre otros extras posibles.
En cuanto a las ayudas de conducción, ofrece un repertorio muy completo. La función Cross Traffic Alert para dar marcha atrás cuando la visibilidad es limitada apoyándose en un freno automático, su sistema de información de puntos ciegos ayuda a hacer más fácil los cambios de carril. Para aparcar, cuenta con cuatro cámaras que aportan una visión 360º y sensores en los costados que detectan la presencia de cualquier objeto sospechoso.
Es importante indicar que es el primer habitáculo en el que Volvo ha evitado el uso de cuero natural para echar mano de materiales sintéticos y reciclados, como también hay que hacer hincapié en las actualizaciones OTA (Over The Air en inglés) que va a recibir continuamente. Con todo ello, ofrece una conducción semi-autónoma.
4. Precio
Como es de esperar dada la filosofía exclusiva de Volvo y la ausencia de versiones de combustión, el C40 Recharge no es un vehículo demasiado accesible en lo que a precio se refiere, ya que parte desde unos 43.869 euros en ausencia de ofertas, promociones y otro tipo de descuentos. Esa cuantía corresponde a la versión con nivel de equipamiento Core y batería de 70 kWh.
En el otro extremo se encuentra el que lleva la batería de 78 kWh, doble motor y un acabado Ultimate, que asciende hasta los 56.627 euros en ausencia de ofertas, promociones y descuentos. Antes de acabar con este apartado, es conveniente apuntar que solamente se puede adquirir de forma online y el comprador solamente tendrá que acudir al concesionario para recibir el coche.
5. Rival en el mercado
Una vez que hemos analizado en profundidad el Volvo C40 Recharge, ahora toca ampliar miradas y hacer una breve comparativa con otro modelo que, por sus rasgos, pueda considerarse su “rival” en el mercado. Para esta vez hemos elegido el Mercedes EQA.
Mercedes EQA
El Mercedes EQA fue presentado al mundo en el año 2021 y, al igual que el auto que ha aparecido por aquí, se encuentra en su primera generación. Estéticamente, quizá sea un poco más atrevido que el coche nórdico, gracias a las protecciones de plástico negro en las defensas y en los bajos, lo cual casa muy bien con la opción de color blanco que dispone. La parrilla es de negro brillante y las llantas que puede portar contienen acabados bicolor y tricolor, acompañadas de detalles en azul y en oro rosa.
Mecánicamente, también ofrece tres alternativas, aunque la tracción por la que apuestan no es la misma. La de acceso, el EQA 250, cuenta con tracción delantera, mientras que las siguientes, las EQA 300 4MATIC y 350 4MATIC cuentan con la tracción total. Eso sí, en cuanto a potencia se quedan atrás, no así en autonomía, ya que ambos cuentan con versiones que contienen alrededor de 420 y 430 kilómetros homologados en ciclo WLTP.
Por dentro, su equipamiento presenta diferencias perceptibles, como la doble pantalla en el salpicadero que permite convivir con el cuadro de instrumentos y al sistema multimedia. También conviene resaltar algunas funciones interesantes, como el control por voz mediante tecnología MBUX que en el Volvo la encarnaba Google Assistant, y su planificador de ruta Electric Intelligence, que facilita al máximo el trayecto al conductor y que en el C40 Recharge no hay nada parecido.
Donde sí pierde comba es en la capacidad del maletero, ya que se limita a 340 litros, y calca el listado de ayudas a la conducción. Económicamente, se mueve en unos precios más elevados de partida rozando los 50.000 euros en su versión de acceso, aunque calca los de su tope de gama. Dicho esto, la carga tecnológica puede decantar la balanza a favor del alemán, pero si se valora la comodidad y el empleo de materiales que rehúyen del origen animal, el Volvo puede ser mejor opción.
