El Ford Puma ha vuelto para quedarse. Sí, no es un coche que nació ayer. A mediados de los 90 Ford sacó al mercado europeo el Puma, un coche del segmento B en forma de coupé de tres puertas y atrevido diseño. De ahí que Ford Motor Company denominó “New Edge” a la línea marcada por el Puma, el Ka y el Focus de primera generación.
Para entrar el contexto, el Ford Puma se lanzó el 1997, cuando los coupés se encontraban en pleno auge. Sin embargo, a principios del siglo XXI, los coupés fueron perdiendo presencia en nuestras carreteras y con ello sus unidades insignia como el Puma, el Mégane Coupé, el Opel Tigra o el Mazda MX-3.
Ahora el Ford Puma es un crossover compacto y de aspecto deportivo. Se ha adaptado a las nuevas tendencias y gustos de los consumidores abriéndose paso en un segmento cada día más competitivo como el SUV. No obstante, el Puma no destaca por su amplitud, pero sí por ofrecer un agradable maletero. A grosso modo, lo que diferencia el Puma de los demás modelos es su deportividad y equipamiento sin tener que hacer grandes sacrificios en términos de confort. Es una opción muy recomendable para quien busque un crossover compacto con aires de deportividad.
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Ford Puma: la apuesta SUV de Ford
Sin duda, Ford tiene claro que el futuro pasa por las manos del segmento SUV. Desde hace años, no hay ningún segmento capaz de hacerle sombra a los SUV, en consecuencia, estos han ido reinventándose y adaptándose a todos los tipos de carrocerías. De ahí que los SUV urbanos, también conocidos como B-SUV, sean el segmento que más ha crecido en el mercado actual.
La hegemonía SUV ha hecho que los compactos y urbanos caigan en picado y deban competir en ligas inferiores; prueba de ello es la caída en ventas del Ford Fiesta y el Ford Focus respecto a años anteriores. En consecuencia, Ford no ha dudado en utilizar alguno de sus nombres más emblemáticos para bautizar los SUV de nueva generación. El B-SUV Puma recupera el nombre del atrevido y juvenil coupé que cautivó a media Europa hace 20 años, sin duda, Ford apuesta fuerte por los SUV.
1. Precios del Ford Puma
Para ponernos en situación, el Ford Puma se ubica dentro del segmento SUV urbano, siendo más pequeño que el Kuga (C-SUV), y con el chasis del Ford Fiesta. Las ofertas y precios del Ford Puma nueva son muy variadas, en concreto, podemos encontrar 22 ofertas repartidas entre los concesionarios oficiales. El precio de salida de un Puma depende de su versión.
El modelo más económico es la versión 1.0 EcoBoost MHEV ST-line de 125 CV gasolina que parte de 16.377€; sin embargo, a partir de los 20.000€ ya podemos encontrar motorizaciones que superen los 150 CV de potencia, como es el caso de la versión 1.0 EcoBoost MHEV Titanium X 155 gasolina, la Titanium X Aut. 1500, la ST-Line 155, o la Vignale 155. También existe el Puma 1.5 EcoBoost ST 200 gasolina que es capaz de albergar en su motor 200 CV de potencia, su precio de salida es de 34.257€ y es el más premium de la gama.
2. Estética atrevida y renovada
El Ford Puma es un vehículo que se instaura en el segmento de los todocaminos urbanos basándose en el chasis del Fiesta. Se trata de un coche más alto, con una estética muy marcada por la deportividad y un toque campero por su altura libre al suelo. Además, el Puma esconde grandes ventajas como su versátil maletero capaz de aumentar su capacidad si se requiere.
Centrándonos en su estética, lo que más destaca de este SUV urbano son los pronunciados pasos de rueda. En relación, cuenta con el faldón delantero de Ford Performance integrado en el parachoques que proporciona una mayor estabilidad y capacidad de tracción, de ahí que a simple vista, recuerde su morro al de un Muscle Car (salvando las distancias). El pronunciado alerón trasero del techo contribuye en la mejora aerodinámica y aporta un rasgo más agresivo en su estética al igual que su parachoques trasero.
Por último, Ford Performance no solo ha trabajo en la estética exterior del Puma, sino también en la interior. De puertas para adentro es un automóvil muy carismático, cabe destacar los asientos deportivos Recaro calefactables y reforzados con los logos ST. Este tipo de asientos aseguran una perfecta sujeción de los ocupantes con independencia de la velocidad y trazada.
El Ford Puma está diseñado para aprovechar al máximo la vida moderna actual. Posee un renovado diseño focalizado en el conductor con un atrevido estilo exterior de Muscle Car urbano. En resumidas cuentas, el Puma no buscará llamar la atención, se la gana discretamente con los pequeños detalles ocultos en una apariencia totalmente deportiva, musculosa y con flancos esculpidos.
3. Motorización deportiva
La gama mecánica del Puma se compone de un solo motor con tres alternativas disponibles: Ecoboost de tres cilindros con 125 CV y 155 CV (con o sin sistema híbrido), otro más potente que monta una red de 48 voltios híbrida que alcanza los 200 CV y, para finalizar, la versión más radical (ST) que montará el mismo motor Ecoboost 1.5 del Fiesta ST llamada ST Line X Microhíbrida.
El sistema de hibridación del Ford Puma es algo verdaderamente destacable. Se trata de una microhibridación que no enmascara ningún elevado consumo, algo muy interesante dado el consumo de la mayoría de motores de híbridos actuales. Dispone de un motor de arranque (alternador) de 11,5 kW de potencia y de una batería de 48 voltios y 10 Ah.
Por consiguiente, la batería se va recargando en los momentos de frenado y desaceleración (cuando levantamos el pie del acelerador), para luego aportar un plus de potencia al motor de combustión. Según datos de Ford Motor Company, el sistema híbrido del Ford Puma permite reducir el consumo de combustible en un 9% con respecto a los mild hybrid.
Otro dato destacable, es la autonomía del motor híbrido, es decir, por debajo de los 15 km/h el motor térmico está apagado a diferencia de muchos otros modelos de la competencia. Esta ventaja se traduce en un mayor ahorro de combustible acomulable en los primeros metros, que, en suma, supone un ahorro económico para el usuario. No obstante, la media combinada homologada marca un consumo de 5,7 L/100 km y, según varios expertos, el consumo excede de la media, llegando a 8,5 L/100 km. Es lógico que el consumo depende del tipo de conducción, sin embargo, parece ofrecer un consumo demasiado alejado del homologado.
4. Equipamiento completo
El Puma tiene dos caras: una exterior rompedora con toda la gama Ford, y otra interior un tanto standard y poco diferenciada del resto de modelos. A bordo del Puma dominan los tonos negros y oscuros (como en la mayoría de Fords), si algo cabe diferenciar son las costuras rojas y alguna línea en el salpicadero. Por dentro, transmite una sensación de calidez a pesar de los abundantes plásticos.
Incluye una pantalla táctil de 8 pulgadas que acapara todas las miradas del salpicadero, en relación ,la interfaz multimedia es muy intuitiva y su velocidad de respuesta es rápida. Como punto positivo destacamos la reducción drástica de botones que Ford ha hecho en sus nuevos modelos.
El espacio de las plazas delanteras es realmente asombroso, hay amplitud y el conductor tendrá la sensación de ir sentado más abajo que en la mayoría de los SUV (carácter deportivo). Es probable que en algún momento la mente nos engañe y nos haga creer que estamos conduciendo un Focus o un Fiesta. En consecuencia, las plazas traseras son un poco más justas: los asientos son cortos y el espacio para las piernas de dos adultos está muy ajustado.
El maletero del Puma ofrece una capacidad de 401 litros igualando al del Captur o Arona (coches más grandes). El fondo plano tiene dos alturas, lo que nos permite escoger entre un maletero más, o menos profundo. Esto se conoce como Mega Box: un compartimento en doble fondo de 80 litros, ¡algo verdaderamente asombroso y útil!
La gama Puma ofrece cinco modelos de conducción: la normal (el modo por defecto), Eco, Sport, Slippery y Trail. Estos dos últimos están pensados para situaciones de adherencia comprometidas (lluvia y nieve) y para caminos de tierra o barro. Lo que notamos como conductores es una mayor respuesta del motor cuando pisamos el acelerador y un endurecimiento de la dirección.
Por otro lado, el modo Normal y Eco son un poco incómodos a bajas velocidades, se notan todos los baches y resaltos. En líneas generales, la dirección es muy deportiva y ligera, con un cambio de marcha muy suave y preciso. En este ámbito, el Pumo destaca sobre todos los demás dando con nota lo que se espera de un SUV urbano.
En definitiva, los ingenieros de Ford han apostado por un comportamiento dinámico, sacrificando un poco el confort en marcha, no obstante, en carreteras secundarias o de doble sentido, el Puma es un excelente vehículo.
¿Y por qué no un renting?
La marca de Detroit ha decidido incentivar el renting como una opción de valor para captar nuevos clientes. Se trata de un alquiler a largo plazo sin opción de compra, pero si queréis usar el Ford Puma sin comprometeros definitivamente, el renting os saldrá muy a cuenta: Ford asume el mantenimiento, el seguro, los impuestos municipales, etc. a cambio de unas cómodas cuotas.
