Rectificar es de sabios, o eso al menos se dice, y parece que la marca Mitsubishi lo hizo hace poco tiempo cuando, tras la decisión que tomó allá por el año 2020, con la que aseguró que iba a dejar el mercado europeo de lado para enfocarse en el de su país natal para, posteriormente, seguir sacando modelos en el Viejo Continente que se adapten a la nueva realidad, con progresivas restricciones medioambientales.
El Mitsubishi ASX es uno de ellos, y va a protagonizar las próximas líneas que componen esta nueva entrada de TopDriverz. A su favor hay que decir que es uno de los coches más exitosos de la factoría japonesa desde que saliese su primera generación en 2010, con cientas de miles de unidades vendidas. ¿Se conseguirá aclimatar al nuevo contexto de sostenibilidad? Vamos a verlo.
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Análisis del Mitsubishi ASX en 5 claves
Una vez que hemos contextualizado y entrado en calor con el protagonista de este post, es el momento idóneo para pasar a la acción y describir los 5 puntos clave que, habitualmente, empleamos en este humilde portal para elaborar las reseñas de vehículos: diseño exterior, estructura mecánica, equipamiento interno, precio y una comparación con un auto similar que compita en su mismo nicho de mercado. Al lío.
1. Diseño exterior
A primera vista, el Mitsubishi ASX recuerda un montón al Renault Captur. No obstante, ambos salen de la misma línea de montaje que el grupo automovilístico tiene localizada en Valladolid (España) en la factoría de Renault. Además, la plataforma sobre la que se cimenta, la CMF-B, resulta de la alianza entre las tres marcas citadas al principio y que la llevan otros coches como el Nissan Juke, el Renault Arkana y el Clio. También “hereda” los pilotos con forma de C y los faros con tecnología LED.
Los detalles que permiten distinguirlo del Renault Captur cuando se le mira con detenimiento son los siguientes: su nombre presente en la zona trasera, el escudo que exhibe en el frontal y la parrilla. Precisamente en la parrilla Mitsubishi aporta algunos de los rasgos que definen su lenguaje de diseño, Dynamic Shield, y que hacen que este coche tenga identidad propia, como los embellecedores de formas esculturales que acompañan a su logo de tres diamantes y un capó que dispone de líneas muy marcadas en los costados. Además de todo esto, sus llantas de aleación pueden ser de 17 ó 18 pulgadas.
Todo ello para competir en el segmento B-SUV con sus 4.23 metros de largo, 1.80 metros de ancho y 1.57 metros de alto, a lo que hay que añadir una distancia de ejes cifrada en 2.64 metros, la cual está homologada para acoger en su habitáculo hasta 5 pasajeros. Su maletero goza de una capacidad de almacenamiento de 401 litros. Todo ello resulta en un vehículo ciertamente robusto alejado de las líneas redondeadas de su inspirador primo hermano galo.
2. Estructura mecánica
Otro aspecto en el que la influencia del Renault Captur es clara sobre el Mitsubishi ASX es la oferta de motores que pone a disposición de los conductores. De esta manera, se puede apreciar una mecánica muy electrificada, con la única excepción de la versión de acceso, encarnada por el motor de gasolina 1.0 turbo con 3 cilindros y 90 CV de potencia. Como detalle, hay que decir que solamente puede ir asociado a una caja de cambios manual de 6 marchas.
En los siguientes escalones se encuentra el propulsor 130T MHEV, un bloque de 1.3 litros con un turbo microhíbrido y un generador de arranque que se acciona por correa y que, a su vez, está acompañado por una batería de iones de litio de 12V con dos niveles de potencia disponibles: 140 CV y 160 CV. En la primera opción dispone de una transmisión manual de seis velocidades, mientras que en la segunda se asocia a una automática de doble embrague con siete relaciones.
El siguiente peldaño lo constituye la propuesta híbrida, que está conformada por un motor de gasolina de 1.6 litros y 145 CV de potencia que trabaja a puro rendimiento junto a dos propulsores eléctricos. Conjuntamente, esta opción ofrece 160 CV de potencia y todo este conjunto se vincula a una caja de cambios automática. En el tope de gama se encuentra un motor híbrido enchufable, con el mismo motor de gasolina que se acaba de comentar, aunque en esta ocasión se apoya en una batería de 10.5 kWh que le permite poder recorrer hasta 49 kilómetros en modo eléctrico puro y duro.
3. Equipamiento interno
Si hay un aspecto en el que Mitsubishi ha puesto toda la carne en el asador con este coche es el equipamiento interno, el cual se presume más amplio que el del Renault Captur. De esta manera, el conductor puede disponer desde un display analógico de 4.2 pulgadas a otro totalmente digital que se puede ir hasta las 9.3 pulgadas que ocupe toda la superficie con un panel totalmente personalizable. Entre medias también hay disponible otro de 7.
A ello le acompaña una pantalla vertical para controlar las funciones del sistema de infoentretenimiento, que puede ser de 7 ó 10 pulgadas, está dotada del sistema Multi-Sense y de conectividad tanto con Apple CarPlay como con Android Auto. En el caso de las versiones más y mejor equipadas, el conductor puede disfrutar de un equipo de sonido BOSE Premium.
Su habitáculo es amplio y cómodo al que tampoco le falta seguridad, tal y como lo demuestra la presencia de numerosas funcionalidades ADAS en este sentido: sistema de mitigación de colisión frontal (FCM) que viene de serie, aviso de cambio de carril, reconocimiento de señales de tráfico, control de crucero (con carácter adaptativo en las versiones superiores), sensores de aparcamiento y cámara de visión trasera.
En las unidades más sofisticadas incorpora el sensor de ángulo muerto, sistema de prevención de exceso de velocidad, asistente de mantenimiento en el carril y luces automáticas. Si se profundiza en sus elementos de seguridad, podemos hablar de sus airbags delanteros y laterales para el conductor y copiloto, un par de airbags de cortina a cada lado, cinturones de seguridad con pretensores y limitadores de carga, reposacabezas antilatigazos y puntos de anclaje ISOFix para sillas de niños.
Para acabar con este apartado, hay que indicar que dispone de hasta tres modos de conducción: Sport, My Sense (el que configura a su gusto el conductor) y el ECO (gasolina, microhíbridos e híbridos) o Puré (de conducción eléctrica exclusivamente y que solo lo puede disfrutar la versión PHEV).
4. Precios
A pesar de que no se han desvelado aún los precios en los que se va a mover el Mitsubishi ASX, hay quien dice que van a aproximarse y mucho a los que tiene el Renault Captur, por motivos más que evidentes, por lo que podría partir desde los 20.000 € aproximadamente. Lo que sí que se sabe es que la garantía se va hasta los cinco años y no estará limitada a tres como ocurre con la marca del rombo.
5. Rival en el mercado
Una vez que hemos examinado a fondo a nuestro protagonista, es el momento de contrastar sus prestaciones y potencial con el de un modelo similar que compita con él en el segmento B-SUV. Para esta ocasión, hemos escogido al Hyundai Kona.
5.1 Hyundai Kona
Con un lustro ya en el mercado, el Hyundai Kona vive inmerso en su segunda generación tras el lavado de cara que recibió en 2020. Al igual que el Mitsubishi, su batalla le permite homologar una estancia suficientemente buena para 5 pasajeros dentro del habitáculo, aunque en su caso, con 2.60 metros, es ligeramente inferior a los del vehículo que copa el grueso de estas líneas, lo cual afecta a la amplitud de su espacio y a la habitabilidad que pueda ofrecer.
Otro punto que juega en su contra es la capacidad de almacenamiento que alberga su maletero, y es que puede ofrecer 332 litros, bastantes menos de los que puede llegar a ofrecer el ASX. No obstante, si se abate la segunda fila de asientos en proporción 60:40 puede alcanzar los 1.156 litros. Donde ambos guardan una gran similitud es en la oferta mecánica, dado que pueden presumir de una notoria presencia de unidades híbridas y de certificaciones medioambientales que, con la pronta entrada de restricciones, se agradecerán por parte de los usuarios. Eso sí, el modelo coreano sí que ofrece en su tope de gama una versión eléctrica a diferencia de nuestro protagonista.
En el equipamiento interno también coinciden en muchos elementos, de forma que se rigen por un concepto muy parecido en el que la tecnología está muy presente. En el caso del Hyundai Kona, se distinguen varios niveles de equipamiento claramente definidos que también lo estarán en el Mitsubishi ASX cuando su comercialización esté en marcha a comienzos de 2023.
Su precio base es ligeramente más bajo, merced a los 17.340 € de su versión de entrada, aunque con los niveles de acabado más sofisticados se puede incluso a más de 40.000 € gracias a la fisonomía eléctrica de su tope de gama. Dicho todo esto, el ASX parece a priori un vehículo más cómodo, pero mecánicamente el Kona es más variado, además de tener una identidad más propia a nivel estético.
