Ya sea por el éxito comercial alcanzado y mantenido en el tiempo, o por el clamor de los usuarios que lo han comprado, hay coches que, a pesar de las varias generaciones que llevan a sus espaldas y el consiguiente largo tiempo en el mercado, siguen reinventándose y aportando un enorme valor a quienes se fijan en ellos. El protagonista de las próximas líneas es un claro ejemplo de ello.
Nos estamos refiriendo al Seat Ibiza, el utilitario por antonomasia de la casa de Martorell. En 2021 presentó su actualización, lo cual habla a las mil maravillas de un vehículo que llegó a nuestras vidas hace ya varias décadas. Dicho esto, en TopDriverz vamos a analizarlo en profundidad para tratar de entender qué aporta nuevo y las razones que le llevan a mantenerse con buena salud.
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Análisis del Seat Ibiza en 5 claves
Tras haber contextualizado a grosso modo lo que rodea al vehículo español, es el momento de desgranar sus características a través de los aspectos en los que solemos incidir en las reseñas de nuestro querido portal: diseño exterior, estructura mecánica, equipamiento interno, precio y una comparación con un vehículo que compita en su mismo nicho de mercado. Allá vamos.
1. Diseño exterior
El Seat Ibiza es un coche de carácter utilitario que lleva fabricándose desde el año 1984 y que va ya por su quinta generación, la cual fue lanzada en 2017. No obstante, en 2021 se sometió a un lavado de cara que le aporta una leve mejora en la estandarización de las luces LED de serie en todos sus acabados, una dotación tecnológica más sofisticada que ya conocen sus hermanos y un interior renovado.
Si hablamos puramente de su diseño, este apenas ha experimentado cambios sobre el vehículo que desembarcó hace ya un lustro y el que hizo lo propio hace una década (2012). En él destacan los nervios rectos bien marcados, la plataforma modular MQB A0 obra de Volkswagen sobre la que se cimenta y que le permitió ganar un treinta por ciento de rigidez torsional, mejorando notablemente la comodidad, el comportamiento y su seguridad al mismo tiempo.
Las llantas de sus ruedas también acogen novedades, y es que ahora tiene tres opciones más: dos de 17 pulgadas y otra de 18. La carrocería recibe en su elenco dos colores nuevos, que hasta entonces eran inéditos: el azul Asfalto y el azul Zafiro. Carrocería en cuyo tren trasero luce el nombre del vehículo en tipografía a mano alzada y que luce el logo de la marca en acabado bitono.
Dicho todo esto, sus dimensiones son de 4.05 metros de longitud, 1.78 metros de anchura y 1.44 metros. A ello hay que añadir una distancia de ejes cifrada en 2.56 metros que garantiza una mínima buena habitabilidad. En su maletero caben 355 litros para guardar equipaje y pertenencias.
2. Estructura mecánica
El aspecto mecánico se mantiene invariable respecto a la generación anterior, de forma que está estructurado, por un lado, en dos motores alimentados a través de gasolina que pueden ofrecer tres niveles de potencia distintos, y por otro en una versión de gas natural comprimido (GNC). En el caso de los primeros, cuentan con tres cilindros y un litro. Veamos las características de cada una de las opciones que dispone el consumidor.
La oferta empieza con un propulsor 1.0 MPI de 80 CV de potencia, el cual trabaja codo con codo junto a una caja de cambios manual integrada por cinco velocidades. Su consumo es muy reducido, dado que homologa tan solo 5.3 litros por cada centenar de kilómetros recorridos, emite unos 122 gramos de dióxido de carbono en cada kilómetro y es capaz de alcanzar una velocidad punta de 170 kilómetros por hora.
Los dos siguientes escalones están constituidos por motores 1.0 TSI de 95 y 110 CV de potencia dotados de turbocompresor, intercooler e inyección directa. El más potente de los dos lleva consigo una transmisión manual de seis relaciones, consume 5.1 litros por cada 100 kilómetros recorridos, emite 116 gramos de dióxido de carbono por cada kilómetro y puede llegar a alcanzar unos 195 km/h de velocidad punta.
La unidad más prestacional está encarnada en el motor 1.5 EcoTSI que lleva la potencia hasta los 150 CV, un par máximo de motor de 250 Nm desde 1.400 revoluciones por minuto hasta las 3.000, contiene un cilindro más que los anteriores (4), tiene como compañera de viaje a una caja de cambios automática de doble embrague de siete marchas, consume seis litros por cada centenar de kilómetros recorridos, emite 138 gramos de dióxido de carbono por kilómetro y goza de 219 km/h de velocidad punta.
En el otro lado de la oferta está la unidad GNC, que presume de la etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico (DGT), se compone de un motor 1.0 TGI de 90 CV de potencia, una caja de cambios manual de seis velocidades, consume tan solo 3.7 litros por cada centenar de kilómetros recorridos, emite 102 gramos de dióxido de carbono y es capaz de alcanzar unos 180 km/h.
Hay que decir que los dos depósitos de gas están ubicados bajo el suelo del maletero, lo que se traduce en sacrificar el espacio destinado tradicionalmente a la rueda de repuesto, y tienen una capacidad de 13 kilogramos. La capacidad de almacenamiento de su maletero se ve reducida hasta los 262 litros.
3. Equipamiento interno
Aquí viene el quid de la cuestión de la actualización a la que se sometió el Seat Ibiza. En primer lugar, hay que decir que ha recibido una pantalla flotante que crece hasta las 9.2 pulgadas en los acabados mejor dotados, además de que es compatible con Android Auto y Apple CarPlay de forma inalámbrica para una conectividad manos libres. Entre sus funciones están el reconocimiento por voz y demás servicios online mediante tarjeta SIM. El cuadro de instrumentos se mantiene en su tamaño de 10.25 pulgadas, que opcionalmente puede ser de carácter digital. Su sistema multimedia puede ser controlado mediante la APP Seat Connect. En cualquier caso, se distinguen tres líneas de equipamiento que comentaremos más tarde: Reference, Style y FR.
Elementos tan valiosos como la cámara de visión trasera, el sistema de recarga inalámbrico o el sistema de acceso y arranque con llave inteligente no faltan entre sus prestaciones. La confección del salpicadero hace que gane en calidad gracias a la apuesta por plástico blando en vez del duro que copaba esta zona en la unidad que salió en 2017, así como en aspecto merced a las molduras en color de las tomas de ventilación. Los aireadores han sido rediseñados para presentar una forma circular y un contorno LED que le da al usuario la posibilidad de personalizar el habitáculo.
En materia de seguridad tampoco adolece de ninguna funcionalidad clave, de forma que ofrece muchos asistentes de conducción como el control de velocidad de crucero adaptativo, el de mantenimiento de carril, el detector de obstáculos en ángulo muerto, reconocimiento de señales de tráfico, asistente de aparcamiento con sensores, cámaras por delante y por detrás y luces largas automáticas, además de las ya comentadas de acceso y arranque sin llave.
El Reference está integrado por faros Eco LED, asistente de cambio involuntario de carril, el de frenada automática en ciudad, detector de fatiga, asistente de arranque en pendiente, sensor de presión de neumáticos, limitador de velocidad, múltiples airbags (laterales, frontales y de cortina), Radio Media System Color con pantalla táctil de 8.25 pulgadas, bluetooth, conexión USB de tipo C, encendido automático de luces, espejos retrovisores ajustables y plegables, aire acondicionado, llantas de 15 pulgadas, volante multifunción y asiento del conductor regulable.
El Style aporta faros Full LED, pilotos traseros LED, control de crucero, faros antiniebla con función Cornering para activarlos automáticamente, pomo de la palanca de la transmisión forrado en cuero y Full Link inalámbrico compatible con Apple CarPlay y Android Auto.
Finalmente, el FR disfruta de una suspensión específica, climatizador automático bizona, espejo retrovisor interior con función antideslumbramiento, faros con función Coming & Leaving Home, encendido automático de luces, sensor de lluvia y traseros de aparcamiento, almacenamiento tras los asientos delanteros, reposabrazos central, paquete exterior propio, volante forrado en cuero Nappa, sistema de iluminación ambiental, asientos delanteros regulables en altura y bolsas portaobjetos en sus respaldos. Si se quiere, se pueden añadir paquetes para complementar.
4. Precio
Dicho esto, el Seat Ibiza parte desde unos 16.820 euros, tasación que corresponde a la versión de acceso con motor 1.0 MPI de 80 CV con el acabado Reference. El Style se mueve entre los 18.350 y los 21.620 euros dependiendo de si lleva ese propulsor, el de 110 o el de GNC. Por su parte, el FR puede irse hasta los 27.462 euros con el motor 1.5 TSI de 150 CV con transmisión de doble embrague.
5. Rival en el mercado
Visto lo mucho que puede aportar el utilitario español a quien lo desee tener, vamos a compararle brevemente con un modelo similar. En esta ocasión ponemos el foco en el Ford Fiesta.
Ford Fiesta
Si ya llevaba varias generaciones a sus espaldas el Seat Ibiza, el Ford Fiesta va más allá con siete. Su actualización más reciente data de 2020. Estéticamente, comparte el dinamismo y el look juvenil del protagonista español, aunque es mínimamente más corto (4.04 metros de longitud). No obstante, cuenta con más acabados para el conductor. También se distingue por ofrecer motores híbridos y varias unidades que se sitúan en niveles de potencia más altos.
En materia de seguridad y calidad de los materiales empleados para el equipamiento, ambos están muy emparejados, como ocurre con los precios en los que se mueven. Dicho esto, si se quiere un vehículo tan solo para ciudad, el Ibiza puede ser mejor opción por ofrecer sus topes de gama por menos, mientras que si se va a salir mucho por la carretera el Fiesta se impone con su versión de gasolina gracias a 200 CV.
