La imperiosa necesidad que existe de cuidar el planeta y las nuevas reglas que van a entrar en vigor próximamente en relación a las emisiones contaminantes hacen necesaria la construcción de una infraestructura capaz de resolver los problemas, satisfacer los intereses y las demandas de las partes implicadas, en este caso los usuarios, las distintas compañías afectadas y los dirigentes políticos.
La industria de la automoción está, por tanto, muy afectada e involucrada en este contexto de sostenibilidad, el cual ha desencadenado la aparición de tantos coches eléctricos, híbridos y de hidrógeno. No obstante, la electricidad está siendo la energía más solicitada en los últimos tiempos, por lo que cabe preguntarse cuántos puntos de recarga de vehículos eléctricos hay en España y dónde.
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Tomen nota los conductores de eléctricos: cuántos puntos de recarga hay y dónde
Tras haber puesto todo en contexto a través de la introducción, es el momento de ir desgranando la información más importante acerca de los puntos de recarga de vehículos eléctricos que se distribuyen por la geografía española. De esta manera, quienes tengáis uno no tendréis que esperar a llegar a casa y emplear la toma que venga de serie para rellenar la batería. Allá vamos.
1. Hay muchos, pero no suficientes
Si ponemos la lupa en la cantidad total de puntos de recarga de vehículos eléctricos que hay en España, lo cierto es que se puede palpar que ya hay un trabajo importante hecho, pero que puede resultar insuficiente. Según estima la patronal de los fabricantes de automóviles, la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), a lo largo y ancho del territorio español hay unos 13.411 puntos de acceso público.
Según la misma institución, la mayoría de ellos se concentran en Cataluña, que copa el 26.46 por ciento del total merced a sus 3.549 lugares habilitados. Le siguen, aunque algo lejos, la Comunidad Valenciana con el 12.39 por ciento del total y 1.661 lugares habilitados y la Comunidad de Madrid, que constituye el 11.94 por ciento gracias a sus 1.601. Sin embargo, el Gobierno de España se marcó en su día unos objetivos que, por ahora, parecen lejanos de verse cumplidos. En 2023 pretendían que la red esté mucho más nutrida de lo que está en el presente, de forma que se sitúe en los 100.000 puntos de recarga.
Las exigencias de Anfac y la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto) no eran tan ambiciosas, ya que pidieron a los dirigentes españoles que alcance los 70.000, pero se antoja sumamente complicado alcanzar cualquiera de esas dos metas. En primer lugar, para llegar a lo estipulado por el Gobierno, la cantidad total tendría que multiplicarse por 7.4 entre 2022 y el siguiente. En segundo, para corresponder a lo que exige la patronal, habría que hacer lo mismo pero por 5.2.
Dicho de otra manera, para que las previsiones sean una realidad, el ritmo de construcción de estas zonas se tendría que acelerar de forma muy notable en los tiempos más próximos, y no parece que eso sea viable. Por si no tuviera suficiente, desde Europa también instan a España a hacer hincapié en los puntos de recarga de vehículos eléctricos. La organización europea ACEA (Asociación de Constructores Europeos de Automóviles) asegura que la implantación de estos lugares no goza de un equilibrio con su extensión territorial, de forma que ocupa el 12 por ciento del territorio y tan solo el tres por ciento de todos los que hay en el Viejo Continente.
En la cantidad por millón de habitantes, la cosa no es mejor, y es que España es el segundo país europeo en número de puntos de recarga público con 245, solamente está por encima de Grecia, que tiene 29. La media comunitaria de 573 parece lejos de alcanzarse a corto plazo. Por tanto, y según la dicha ACEA, España tendría que tomar el ejemplo de otros países de su entorno como Alemania, Francia e Italia, donde sí que está compensada la presencia de puntos de recarga con el tamaño de su territorio. En el país vecino, por no irnos muy lejos, la instalación de estos puntos supone el 14 por ciento de su superficie y el 21 en toda la UE.
2. Se han lanzado varias iniciativas públicas y privadas
Grandes empresas energéticas como Repsol e Iberdrola, así como las instituciones gubernamentales, han llevado a cabo iniciativas que deben contribuir a hacer más palpable la presencia de los puntos de recarga para vehículos eléctricos. Veamos por partes qué facilidades se dan para ello.
2.1. El Plan Smart Mobility de Iberdrola
Iberdrola ideó el llamado Plan Smart Mobility, que incluye en su hoja de ruta la puesta en marcha de, al menos, una estación de recarga rápida cada 50 kilómetros. De esta manera, la compañía asegura que será posible viajar por toda España con total autonomía. Para ser más exactos, su red se extenderá por las seis autovías radiales (A1 Autovía del Norte, A2 del Nordeste, A3 del Este, A4 del Sur, A5 del Sureste y A6 del Noroeste) y los tres corredores transversales principales: Mediterráneo, Cantábrico y Ruta de la Plata. Además, llegará a todas las capitales de provincia y, cómo no, a las principales ciudades del país.
Las estaciones que estarán presentes en su zona serán de carga rápida (50 kW), superrápida (150 kW) y ultrarrápida (350 kW). De esta manera, será posible recargar la mayor parte de la energía de la batería en cuestión de entre 20 y 30 minutos y, si ponemos el foco en las ultrarrápidas, en un intervalo de solamente entre cinco y diez (siempre que el vehículo así lo permita). En cada punto podrán estar entre dos y siete coches a la vez, lo cual hace prever que haya más de 400 puntos de recarga rápida en toda su red.
Asimismo, el plan tiene previsto instalar estaciones ultrarrápidas cada 200 kilómetros, super rápidas cada 100 y rápida, como hemos dicho al comienzo del epígrafe, 50. En 2020 ya se instalaron más de 5.500 puntos en todo el país, de forma que 600 son de recarga rápida en la vía pública, mientras que más de 1.800 se reparten entre las rápidas, súper rápidas y ultrarrápidas serán instaladas en esa misma ubicación en distintas etapas de desarrollo. El objetivo de Iberdrola es poner a funcionar unos 150.000 puntos de recarga de vehículos eléctricos en cuatro años.
Como se puede deducir a tenor de lo descrito, no hace falta ser cliente de Iberdrola para recargar tu coche en cualquiera de sus estaciones, sino que es suficiente con tener instalada en el teléfono la aplicación Recarga Pública Iberdrola, donde podrán geolocalizar, reservar y pagar sus recargas a través de su smartphone.
Para ello, completó el primer mapeo que verifica la presencia y operatividad de los cargadores, así como sus características técnicas, mapa que incluye más de 3.600 cargadores en vía pública para eléctricos en 1.200 localizaciones del país. Los usuarios pueden informar de nuevos puntos de recarga que, tras someterse a verificación por Iberdrola, se añadirán a la aplicación.
2.2. Plan Moves III lanzado por el Gobierno
El Plan Moves III, como su propio nombre indica en parte, es la tercera edición del programa de ayudas lanzado por el Gobierno de España con el fin de incentivar y promover la compra de coches eléctricos y la instalación de sus puntos de recarga, lo cual se seguirá haciendo hasta llegar al final del año 2023.
Para ello, el presupuesto con el que cuenta es de unos 400 millones de euros, ampliables hasta el doble en función de la demanda que haya, para ayudas directas a la movilidad eléctrica y para la infraestructura de recarga. La iniciativa contempla subvenciones para adquirir cualquier tipo de vehículo eléctrico (coches, motos, furgonetas) así como automóviles de cuatro ruedas híbridos enchufables.
De esta forma, se pueden descontar hasta unos 7.000 euros en la compra de un vehículo eléctrico que no supere los 45.000 euros de precio. Si prestamos atención a la instalación de puntos de recarga, se pueden aprovechar autónomos, particulares, las comunidades de propietarios, las administraciones públicas y las empresas.
Respecto a su antecesor, el Plan Moves III incrementa el presupuesto destinado a las ayudas para instalar puntos de recarga, de manera que cubre hasta el 80 por ciento del importe, el doble (40) que el anterior. Eso sí, hay que saber que el porcentaje exacto de la ayuda está sujeto al tipo de beneficiario y la cantidad de habitantes del pueblo o ciudad en el que se instale el wallbox. En la instalación de puntos de recarga se cubre un porcentaje de la inversión total que ha supuesto ese proceso:
- En municipios con más de 5.000 habitantes: subvención del 70 por ciento sobre el total para autónomos, particulares, comunidades de propietarios y administraciones públicas.
- En municipios con menos de 5.000 habitantes: subvención del 80 por ciento sobre el total para autónomos, particulares, comunidades de propietarios y administraciones públicas.
Si nos detenemos en las estaciones de carga rápida (50 kW) y en lo que repercute a las empresas y puntos de acceso público, la cosa queda así:
- En municipios con más de 5.000 habitantes: 35 por ciento para grandes empresas, 45 por ciento medianas empresas y 55 por ciento pequeñas empresas.
- En municipios con menos de 5.000 habitantes: 40 por ciento grandes empresas, 50 por ciento medianas empresas y 60 por ciento pequeñas empresas.
Finalmente, en lo que atañe a las empresas y puntos de acceso público en estaciones por debajo de los 50 kW, está regulado así:
- En municipios con más de 5.000 habitantes: se subvenciona el 30 por ciento del total.
- En municipios con menos de 5.000 habitantes: se costea el 40 por ciento sobre el total.
