Cuando queremos vender un coche, esperamos una respuesta inmediata de los compradores, realizar la transacción lo más rápido posible y disfrutar del dinero sin preocupaciones. El problema está en que, en cada portal de internet dedicado a esto, hay miles y miles de ofertas que compiten por captar la atención de la gente. Y sí, es importante que el coche esté en buenas condiciones, los papeles en regla y que la descripción del anuncio incluya toda la información relevante, pero sin unas buenas fotos, las otras personas no van a hacer click y te vas a quedar sin vender el coche.
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¿Cómo tomar las mejores fotos para vender un coche?
No podemos dejar de lado que vivimos en una sociedad donde la presencia es muy importante. Experimentamos a diario este manera de socializar: por poner solo 3 ejemplos, tenemos que ir bien vestidos al trabajo si estamos de cara al público, en aplicaciones para ligar tenemos que mostrarnos lo más guapos posible y, al comprar la fruta, esta tiene que estar impoluta y sin ninguna tara (aunque con algún golpe, esté buena igual).
Por tanto, si hemos hecho el esfuerzo de tener el coche bien arreglado acorde con el precio de venta, esto no nos servirá de nada si no publicamos un anuncio totalmente atractivo para el posible comprador. Nadie nos llamará si no confía en las primeras impresiones del coche.
Si disponemos de un móvil con una buena cámara, podemos intentar hacer las fotos directamente con este dispositivo. Solo tendremos que seguir algunos de los consejos abajo explicados. No obstante, no pasa nada por invertir un poco de dinero en equipo fotográfico (o pedir el material prestado) para conseguir unas imágenes más atractivas. Es mejor gastar un poco de dinero en la promoción que no vender el coche. En el portal Milanuncios, hay más de 500.000 anuncios solo de coches, compitiendo los unos contra los otros. ¿Realmente te querrás arriesgar a no poner atención en el aspecto fotográfico?
1. Limpia a conciencia el vehículo
Lo primero que tenemos que hacer es acondicionar el coche de forma que quede bonito y esto pasa por lavar y limpiar el coche a conciencia. No debemos escatimar en darle un buen tratamiento. A ver, estamos en lo de siempre: si vendemos una carraca por 1.000€ quizá no haga falta, pero, si queremos sacar un buen dinero, un encerado no nos vendrá mal.
Respecto al tema de los rasguños o desperfectos menores, si el coche los tiene lo mejor es ser sinceros en el anuncio y hacer alguna rebaja, ya que en la vista presencial el cliente los va a detectar. No obstante, no metamos fotos de las partes feas del coche. Por último, si nos reluce de lo limpio que está, podemos optar por usar un filtro polarizador que elimine brillos y reflejos.
2. Elimina objetos innecesarios
El coche ya no será nuestro y, por tanto, conviene antes de hacer el traspaso eliminar todas las pegatinas que tengamos enganchadas en la parte trasera y otros adornos. Además, si tenemos accesorios, también os recomendamos quitarlos al hacer las fotos, como, por ejemplo, unos cojines para los asientos traseros. La razón está en que nos interesa que el interesado se visualice a él mismo con aquel vehículo y, si ve objetos nuestros, no lo va a poder hacer tan fácilmente. Debemos pensar que el coche no deja de ser un bien personal que debemos despersonalizar antes de venderlo.
3. El entorno y la composición
Si fotografiamos el coche en una calle sucia con gente detrás paseando, perderemos la oportunidad de hacer destacar nuestro vehículo. Nos subimos al coche y nos vamos a un lugar lo más bonito posible: una carretera en el bosque, un prado de flores o un mirador sobre el mar. Hasta incluso una pared blanca nos va a servir.
La combinación con el entorno llamará la atención inmediatamente en medio de tantos anuncios y hará creer que el coche es bellísimo. En el caso que optemos por un paisaje de ensueño, se recomienda utilizar un gran angular que lo encuadre todo. También deberemos cuidar la composición de manera que quede armónica.
4. El momento del día
El momento del día también será importante. Si no somos expertos en fotografía, lo más fácil será disparar las fotos en horas de luz donde la foto nos quede bien con facilidad. No obstante, si queremos ir un paso más allá, hacer el proceso en el atardecer, el amanecer, las llamadas horas azules y doradas, convertirá nuestro anuncio en algo muy profesional, prácticamente de agencia de publicidad. Combinar la luz exterior y las del coche nos dará, sin duda alguna, un resultado sorprendente. Hay también quienes recomiendan hacer las fotos en un día de sol, pero un poco nublado.
5. Tipos de fotos
Hay unas fotos que son claves: la lateral, la frontal/trasera y la longitudinal. La lateral nos da la información básica del vehículo, cómo es, cuántas puertas tiene y el tipo de llantas y neumáticos. Se recomienda hacerla siempre desde el lado del conductor (evidentemente, puedes hacer otra desde el otro lado) porque el interesado se puede visualizar conduciendo. En la frontal y trasera daremos el detalle exacto de la marca y el modelo, una información imprescindible. Con la longitudinal, resaltaremos la belleza del vehículo; para eso, debemos hacer coincidir un eje imaginario con la rueda delantera y trasera.
6. El motor
Una parte importante que interesa mucho que se vea bien es el motor. El motor no solo debe estar en buen estado, sino que debe parecer en buen estado. Aunque el coche luzca perfecto, si el comprador desconfía de la mecánica, no haremos negocio. Por tanto, deberemos tomar una foto general del motor y otras más específicas de sus partes. No hace falta que nos centremos en nada en especial, sino que dejaremos que el interesado saque sus propias conclusiones.
7. No olvides zonas clave
Y no solo debemos mostrar el exterior y el motor, sino que debemos tomar algunos planos del interior: estado de la tapicería, espacio del habitáculo, volante y cuadro del conductor, etc. Un truco que resulta muy interesante visualmente es jugar con la profundidad de campo para que aquello que nos interesa quede resaltado difuminando el fondo.
8. Teleobjetivo, trípode y bracketing
Para un profano, es difícil entender la terminología técnica, pero es esencial que contemos con los siguientes objetos: un teleobjetivo, que permite abrir el plano o cerrarlo sobre las partes que nos interesan y da unos muy buenos resultados. Los angulares y los gran angulares permiten hacer planos generales, también en el interior, y, si tuviéramos que vender más de un coche, nos permitirían encuadrarlos todos. El trípode es básico para fotografías estáticas. El bracketing nos permitirá conservar el máximo rango dinámico en situaciones de alto contraste.
9. No hagas fotos en movimiento
Es tentador poner fotos del coche en movimiento para mostrarlo en acción. Esta moda procede de las redes sociales como Instagram donde los amantes de los coches necesitan mostrar la belleza del vehículo por la carretera o el circuito. Porque un anuncio no dista mucho de un post de Instagram, realmente. No obstante, estaremos perdiendo el tiempo intentando sacar una foto decente, ya que no aportaría nada al comprador. Si le gusta el coche en parado, ya hará una prueba de conducción. Por tanto, no hagamos fotos en movimiento y asegurémonos que el coche funciona perfectamente.
10. Acude a un profesional
Evidentemente, un profesional de la fotografía nos va a salir mucho más caro que hacerlo nosotros mismos, pero, si queremos asegurarnos el tiro, no será una mala opción, sobre todo si queremos vender el coche por un precio elevado (es decir, no nos estamos vendiendo un Ibiza por 1.000€).
Todos los trucos que hemos explicado arriba, el fotógrafo los domina a la perfección y, si escogemos a uno que sea especialista en coches, sabrá sacar todo el partido al vehículo. Este punto tiene una cara B que debemos tener en cuenta. Si solo colgamos fotos perfectas, el posible comprador puede llegar a pensar que son fotos de Google Imágenes y que es una estafa. Por tanto, deberemos también incluir alguna foto un poco “imperfecta”.
BONUS: errores que no debes cometer
Asegúrate de que la foto no la haces desde una posición elevada porque el coche parecerá prácticamente un juguete. Así que baja la cámara o el trípode para quedarte a la altura exacta. En segundo lugar, no debes salir tú en la foto ni en los reflejos: salir en la foto con la cámara en la mano resulta simplemente ridículo y servirás como carne de meme. Por último, si hemos limpiado bien el coche, que el desplazamiento hacia el lugar de la foto no nos ensucie el coche antes de hacer la foto. Y, con todo eso, no garantizamos resultados, pero destacarás por encima de tus competidores.
