Tendemos a ver por la televisión miles de personas cortando una carretera con pancartas de “queremos el desdoblamiento de la carretera” o “gratuidad de los peajes de la autopista ya”. Desde el sofá de casa, nos reímos de estas reivindicaciones porque nunca hemos tenido ninguna dificultad a la hora de conducir. Todas las carreteras son seguras en España, quizás puedas tener más probabilidades de tener un accidente si cogemos algún camino de montaña que no sale en el GPS. Pero la seguridad impera.
Es natural que pongamos el foco en que la mayoría de los accidentes se producen por la irresponsabilidad de los conductores. Y así es hasta que nos topamos nosotros mismos con un tramo de carretera lleno de camiones, llegando tarde a la cena con los suegros, los niños detrás preguntando que cuánto falta, sonando heavy metal en la radio y en las noticias de las 9 dicen que una familia ha fallecido en un terrible accidente cuando intentaban un adelantamiento.
Al parecer, en aquel punto negro, ya habían muerto 10 personas más, y los vecinos piden a gritos que se resuelva el problema. Otra de las causas para que un tramo de carretera se convierta en un punto negro es la falta de mantenimiento de la vía. La crisis económica de 2008 redujo las partidas destinadas a mantener una calidad óptima en nuestras carreteras. Si nos hacen escoger entre sanidad o mantenimiento de las vías, ¿quién escogería las vías? Pues bueno, un asfalto en buenas condiciones nos evita muertos y, además, mejora las comunicaciones entre municipios, lo que mejora la economía a largo plazo.
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¿Cuáles son los principales tramos negros de las carreteras españolas?
La determinación de la peligrosidad de los tramos se basa en el informe RACE 2020 de Evaluación de la Red de Carreteras del Estado en colaboración con el programa EuroRAP, el European Road Assesment Programme. Se han localizado un total de 50 tramos de Riesgo Elevado, de los cuales 9 son tramos “negros”, considerados de Riesgo Alto para la seguridad de los conductores y pasajeros y que suman un total de 117,1 Km.
En estos 50 tramos se han producido 234 accidentes mortales que han dejado 72 muertos y 227 heridos graves durante el 2020, lo que supone una media anual de 78 accidentes mortales y graves, 24 fallecidos y 76 heridos graves. La intensidad media en estos tramos es de 4.095 vehículos al día. El concepto clave es el Índice de Riesgo que se define como el número de accidentes mortales y graves ocurridos en un tramo por cada 1.000 millones de vehículos/kilómetro. Pero, ¿cuáles son los diez tramos más peligrosos de España? Vamos a verlos.
1. N-240 Huesca
Entre el km. 303 y 316,8 encontramos lo que podríamos llamar la carretera más peligrosa de España. Y sería un buen eslogan publicitario para atraer turismo, si no fuera porque no estamos para bromas: solo en el 2020 se registraron 4 accidentes graves, ninguno de ellos, mortal, por suerte, pero una persona quedó muy grave. El índice de riesgo es de 118,9 y ya llevan tres años seguidos en el “pódium”, así que cuidado.
2. N-541 Ourense
Entre el km. 23,5 y el 33,6. El índice de riesgo es de 107,2, un poquito mejor que el anterior, pero no hay motivo para que nos relajemos: 5 accidentes graves en 2020, con un herido muy grave. La evolución de este punto, con inicio en la Z.U. de Dacón y final en la Z.U. de Almuzara es preocupante porque en 2017 tenía un índice de 85,4, en 2018 subió a 150,2 y 107,2 en el 2019. La administración no ha sido capaz de encontrar soluciones.
3. N-345 Murcia
Entre el km. 0 y el 7,2. Dos accidentes graves en el 2020 encendieron todas las alarmas en la comunidad. La zona sur de España había siempre sido un poco más segura que la Norte, como podemos analizar en los datos de 2018, pero la tendencia parece revertirse. Para los que viajen a explorar un territorio poco conocido de la geografía española, será necesario ser precavidos.
4. N-642 Lugo
Entre el km. 0 y el km. 8,2. Encontramos entre el cruce con la N-640 y el cruce con la N-634 en Ribadeo, uno de los habituales de estas listas. No sabemos qué pasa en Galicia, pero tener tres carreteras con tres años seguidos puntuando muy mal, no es bueno para el turismo ni para la economía en general. Dos accidentes graves en 2020 atestiguan la gravedad de la situación.
5. N-550 A Coruña
Entre el km. 26,8 y el 36,9. 8 accidentes graves en 2020, no estamos exagerando. Ningún herido grave, por suerte. Un índice de riesgo del 94, 5, el mismo número que en el año anterior. Ahora que se ha estabilizado el número, hace falta bajarlo sin demoras.
6. N-340 Málaga
Entre el km. 296,4 y el 312,9. El 2020, año de confinamiento nos dejaba la esperanza de poder frenar los accidentes en esta carretera. ¿Lo consiguieron? Por desgracia, no. 7 accidentes graves con 4 personas gravemente heridas no son los datos que uno espera. Máxima, máxima precaución y seguid las recomendaciones en este tramo.
7. N-433 Huelva
Entre el km. 113,8 y el 127,5. Se encuentra la vía que une Cortegana y Rosal, en la que desde mayo de 2020 se han iniciado las obras de rehabilitación de la N-433 para mejorar su circulación. ¿El tiempo esperado? 27 meses y de momento... Tres accidentes graves y una persona gravemente herida en 2020. Como ya hemos dicho en un punto anterior, la zona sur de España era un resquicio de seguridad. Ahora Huelva tiene un tramo con un índice de riesgo del 93,4.
8. N-433 León
Entre el km. 285,3 y el km. 300,4. Hasta ahora, estábamos hablando de accidentes graves, heridos graves. Quizá no nos parezca tan preocupante la situación. Pues ahora ya hablamos de muertes. Cuatro accidentes graves, un fallecido y un herido grave. Un índice de riesgo del 92,8. Poco más podemos añadir, la situación en este tramo tiene que mejorar entre todos.
9. N-330 Valencia
Entre el km. 188 y el 210,4. Cinco accidentes graves, un fallecido y un herido grave. Algo pasa en el levante español. El índice de riesgo del 91,7 no augura nada bueno. Por desgracia, la provincia de Valencia posee varios tramos de especial peligrosidad como: la A-7, la A-3 y la V-31. Pero los 22 km de la N-330 que discurren entre su cruce con la N-3 en Utiel y Sinarcas, es el tramo más “negro” de la provincia valenciana con una intensidad de más de 2.000 vehículos al día.
10. N-260 Girona
Entre el km. 117,3 y el 179,5. 62 kilómetros de sufrimiento sin respiro para los conductores. Y aun así, ya no son un tramo negro, sino que ahora son rojos con un índice del 89,6. Habían llegado a ser el ejemplo paradigmático de carretera peligrosa, estando en el top de tramos negros. Ya sabemos que queréis saber los números para saber si preocuparse o no. Pues bien, en el año 2020 hubo 15 accidentes graves con un total de 4 heridos de consideración. Han cambiado de color para bien, pero sus números siguen siendo escalofriantes.
Ahora bien, ¿qué hacemos los conductores?
En total, el número de tramos analizados en España por el programa EuroRAP y RACE es de 1.388. El 42,7% de los tramos tienen un índice bajo, el 35,3% un índice bajo-medio; el 12,5%, un índice medio; el 5,8%, un índice medio alto, y el 3,6%, un índice alto, lo que conocemos por tramos negros. Aragón, Castilla y la Mancha y Castilla y León son las comunidades que más tramos peligrosos acumulan. Por el contrario, la Comunidad de Madrid, País Vasco y Navarra no tienen ningún tramo complicado.
Así pues, deducimos que la mayor parte de la red viaria española es segura. Hasta aquí los conductores y todos los ocupantes pueden respirar aliviados. Pero nos tiene que preocupar que un 9'4% sean zonas de riesgo. Y nos tiene que preocupar porque, además, la sensación es que esto se va a estabilizar o a aumentar. Todos los tramos donde se concentran accidentes están señalizados como tales, pero ¿de qué sirve si algunos han subido en su índice de riesgo? Parece que no es suficiente poner un cartelito advertidor.
Una de las soluciones es que, por parte de las administraciones, en colaboración con las federaciones de automovilistas, hagan un estudio detallado de cada tramo conflictivo y pongan medidas para solucionar el problema. Pero la sensación es que estos estudios ya están hechos y que el problema es la falta de dinero o de preocupación directamente. Nos apoya en esta teoría el mirar qué comunidades tienen las carreteras más seguras, que son las mejores financiadas.
Por tanto, la responsabilidad pasa a los conductores. A las recomendaciones básicas clásicas como prestar atención a la carretera, no utilizar el teléfono móvil mientras conducimos, no coger el coche si pasamos de los límites de alcohol, respetar las indicaciones de velocidad, etc., a todo esto, tenemos que sumarle un plus de preocupación y cura en estos tramos tan complicados. Ya sabemos que todos sois buenos conductores y que respetáis las señales y conducís con sentido común, pero en estos tramos también se han accidentado buenos conductores como vosotros. Y pensad que no solo ponéis en riesgo vuestra vida, sino que ponéis en riesgo la vida de otras personas.
Por lo demás, a disfrutar de los lugares a donde nos conducen algunas de estas carreteras, que son muy bonitos de visitar. La “carretera más peligrosa de España” nos puede llevar al Puente la Reina de Jaca o al Canal de Berdún, dos pueblecitos maravillosos. Y si encontramos por la zona un buen restaurante, nos podremos resarcir de haber pasado tan mal trago.
